Todo el mundo sabe que en cuanto a mensajerías móviles, al menos en Europa, Whatsapp chorrea de placer ante la competencia. Nosotros también lo haríamos si comparásemos usuarios con la competencia y si, encima, les hemos estado cobrando 0,99€ durante dos años.
Pero seamos claros, cuántas ganas de poder enviar una fotografía como mamá nos trajo al mundo, solo que con algunas mejoras eroticofestivas, y poder disfrutar libremente sin tapujos con nuestros contactos, sean los que sean. Hay pocas mensajerías que aporten un anonimato completo o que en su defecto no permita a nuestros contactos identificarnos fácilmente. Hay una aplicación que lo ha conseguido y en Canadá está arrasando.
Hace tiempo que la estamos probando y no queríamos explicar nada sin tener conocimiento fehaciente del producto. Desde hace unos pocos años los hijos de los arces gigantes, muy calenturientos ellos -han de combatir ese frío que congelan los pezones a través de los tupidos jerséis-, crearon una aplicación con la que comunicarse a distancia pero obtener el mayor anonimato posible.
Se trata de Kik, compatible con Android, Apple y Windows, que permite al usuario registrarse únicamente aportando un usuario y un e-mail, pudiendo escoger además los datos a mostrar.
Las pantallas son muy sencillas y te permite buscar a los usuario por apodo. Lo malo es que para encontrar a alguien significa buscar y compartir los datos por alguna vía (chat, foro, mensaje, etc.).
Aún así es una aplicación que se va extendiendo y pronto llegará a más manos entre los europeos, así que mejor estar preparados y listos para recibir mensajes de todo tipo desde los normales hasta los que nos ayuden a flirtear y chatear sin ningún tipo de miedo a que nuestra madre nos vea como nos trajo al mundo, solo que algo más eroticofestivo.
Esto es todo por hoy.
Esperamos que os haya gustado.
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