El nuevo medicamento promete aumentar la líbido de mujeres no menopáusicas, si bien las pruebas realizadas no son para echar cohetes, y al tiempo conlleva una serie de efectos secundarios como como somnolencia, náusea, desmayos, interacciones negativas con el consumo de alcochol y disminución de la presión arterial.

La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) ha rechazado este medicamento en dos ocasiones por su escasa eficacia. Sin embargo, por lo general, el organismo regulador estadounidense sigue el consejo de los comités de expertos, que recientemente instaron a su comercialización.

Preocupación por sus efectos a largo plazo

La valoración positiva que el comité hizo del viagra femenino se acompaña de unos requerimientos al fabricante. En concreto, se le pide a la compañía Sprout Pharmaceuticals que establezca procedimientos que aseguren que quien decida tomarlas lo haga bien informado de sus riesgos.

También se subrayó el riesgo que supone su uso sin tenerse claro cuáles son los efectos de su uso a largo plazo. Y s que, por mucho que el medicamento busque despertar el deseo e incitar al juego sexual, como ocurre con tantos y tantos medicamentos, su consumo es algo muy serio.

Una baja eficacia

Son muchas las mujeres que tienen una líbido baja, y alrededor del 40 por ciento tienen una escasa actividad sexual a consecuencia de distintos grados de bajo deseo sexual, pero encontrar una solución unitaria es poco menos que imposible. Tal y como explican los expertos, la complejidad emocional de la sexualidad femenina pueden no obedecer a causas médicas.

Sus efectos tienen mucho que ver con la autosugestión. Según los resultados de un ensayo clínico publicado en la web de la FDA revelan que las mujeres que tomaron flibanserina tuvieron una media 4,4 experiencias sexuales satisfactorias en un mes, frente a 3,7 en el grupo que consumió el placebo y 2,7 antes de que iniciarse el estudio.