Cuckold es la palabra anglosajona con la que referirse a la persona que tiene o va a tener cuernos, enfocado mayormente a que sea ella la persona «infiel» y él quien reciba dichos cuernos. Hemos puesto infiel entre comillas ya que, pese a lo que mucha gente pueda llegar a pensar, se trata de un juego aceptado o pactado por lo que no es una infidelidad propiamente dicha.
¿Quién interviene?
Este tipo de juego suele ser «jugado» por tres tipos de personas:
Esposa-Pareja
Puede ser el marido en caso de una relación homosexual o heterosexual, pero es mucho menos frecuente. También suele ser referida como zorra, puta o viciosa; eso depende de cada pareja y es opcional según los gustos personales.
En este tipo de relación-juego ellas suelen adoptar una posición dominante-activa hacia sus maridos y una pasiva-sumisa hacia el corneador.
Corneador/a
Se denomina así a la(s) persona(s) que vayan a tener sexo con la Esposa, aunque también los hay que simplemente se envían mensajes de texto, tomar algunas copas o vestir entre ambos al marido como una mujer.
Cornudo/a
Se denomina así al marido, o esposa en muy pocos casos. Suele ir siempre en cinturón de castidad cuando su esposa va a tener sexo con otros o de una forma más constante y discontinua. Su papel no es otro que el de satisfacer a su pareja en todos los ámbitos a excepción del sexual.
Entre esas tareas el marido suele ser «forzado» a vestirse como mujer o practicar sexo oral al corneador.
Por mucho que parezca imposible, la impuesta de cuernos es un juego sexual que ambos en la pareja han aceptado y que cada vez más reúne a gran cantidad de gente. Choca la idea de una pareja mujer-esposo /novio-novia en la que, mayormente, no tengan sexo entre ellos pero sí les excite.
Ahora, hay ejemplos en los que más que juego se convierte en crueldad y que NUNCA debe ocurrir. Estos ejemplos, y algunos aspectos de lo que hablaremos hoy, lo sacamos de la antigua web de Fantasias Cuckold.
1.- Una pareja en la cual ella no lo amaba, pero no se atrevía a dejarlo, entonces convirtió a su marido en un cornudo sumiso, a él no le gustaba pero aguantaba por el miedo de perderla. Esto duró hasta que ella conoció a otro del que se enamoró locamente y al paso del tiempo, logró sacar fuerzas para dejar a su marido e irse con su amante.
Esto NO ES UN JUEGO, es una pareja infeliz y cobarde la cual no se atrevieron a expresar sus verdaderos sentimientos con su pareja. Eso que hizo esa mujer, no es un juego, es una putada.
2.- Un hombre que convenció a su mujer para que le fuera infiel, él le dijo a ella que estos juegos le gustaban y que no podía vivir sin ellos. Era todo mentira, no le gustaba, realmente le daba igual que se los pusiese su mujer o no, él lo que quería es no tener mala conciencia porque le era infiel a su mujer.
Como podéis comprobar estas personas no amaban a sus parejas y utilizaron de excusa este juego para su interés propio. Lo fundamental e imprescindible en esta relación sexual es el acuerdo, el morbo y el interés de todos sus integrantes, sin excepción.
Ejemplo de roles
1. Mujer = Infiel Marido = Cornudo/a
En este tipo de ejemplo la mujer es la «infiel». Tiene que gustarle, apetecerle y excitarle juguetear con otros hombres (o personas) delante de su marido. Algo también fundamental que no hemos comentado antes y que, ignorándolos puede ser muy perjudicial, es el tema de los celos. Hay que entender este tipo de juegos como quien elige un día en concreto realizar un trío: la confianza ha de ser suma y haber el convencimiento que se trata de un juego sexual que os excita a ambos y que no se le engañará a ninguno de los dos por la espalda. Todo irá de cara.
Roles que puede adoptar la mujer, a la vez o por separado.
1.- Sumisa (con las personas que no sean su pareja)
2.- Exhibicionista (hacerlo en clubs determinados, en casa, en mitad de un lugar abierto. 3.- Dominante (con las personas que no sean su pareja, hacia su pareja o la única que elige qué hacer) 4.- Putilla. Hay quien juega con la fantasía que les han pagado por ello. 5.- Traviesa. Hay quien «usa» a los pizzeros y otros gremios de imprevisto
Roles que puede adoptar la pareja, a la vez o por separado.
1.- Voyeur (ver todo el rato cómo se lía su mujer) 2.- Bisexual (como el ejemplo anterior pero también «participar» como diga su pareja). 3.- Humillados (frente a las personas). Puede incluir travestismo. 4.- Casi-voyeur. No les gusta verlo pero sí que les digan qué ha hecho y cómo.
Lo que hay que sacar en claro es que a ambos debe gustarle y sentirse atraídos. Sentimos si parecemos muy repetitivos, pero al igual que en BDSM hay que vigilar que no se amorate una zona aquí es importante evitar los celos y rencores.
2. Marido = Infiel Mujer = Cornudo/a
Por lo que sepamos es muy difícil encontrar este ejemplo. De todas las parejas que conocemos que disfruten de esta forma de vida, o juego en algunos casos, solo una pareja disfruta siendo ella la cornuda siendo humillada. Como dicen muy bien Laura y Jose el juego es mucho más frecuente en el ejemplo anterior ya que se juega con la hombría y orgullo del hombre, algo incomprensible en este ejemplo.Eso sí, para una pareja que realice juegos de sumisión puede ser un ejercicio «interesante» mostrarle a una sumisa que no tiene sexo por su mala conducta (justificada, no como excusa para follarse a otra delante de ella) ó para rectificar su «frenesí sexual y masturbador». Algo largo de explicar aquí, con suerte le dedicaremos otro tema.
Esto es todo por hoy. Esperamos que os haya gustado. No olvidéis comentar y compartir esta entrada en vuestras redes sociales. Es un minuto y ayuda inmensamente a la web.
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